Los vídeos del grupo musical OK GO se vuelven virales inmediatamente, gracias a su creatividad visual y destreza técnica. Éste ha vuelto a ser el caso del último vídeo para su canción “One Moment”, que en realidad es una colaboración musical para el anunciante Activia.

Éste es un vídeo de 4 minutos de duración que ha sido grabado en tan sólo 4,2 segundos con cámaras de alta velocidad, una técnica que ya ha sido utilizada anteriormente en numerosos trabajos de otros autores, pero que OK GO lleva a un nuevo límite de sofisticación técnica. Es hermoso ver cómo lo que parece tan sólo una serie de rápidas explosiones se transforman en cámara lenta en acciones mucho más complejas. Técnicamente es muy difícil sincronizar la canción con todas las rápidas acciones o eventos que tienen lugar, que según las notas de producción son exactamente 318. ¿Cómo lo hicieron?

Las tomas necesitaron de una planificación extremadamente precisa y con una coreografía descrita en todos los detalles, lo que se llevó a cabo a través de una hoja de trabajo que constaba de 25 columnas y 400 líneas de longitud, donde se calculaba el tiempo exacto de cada evento a partir de datos que relacionaban cada evento con los otros y en la escala temporal en la cual serían grabados. Éste es un pantallazo de tan sólo las primeras líneas, donde nos podemos hacer idea de la complejidad de la producción:

ONE MOMENT OK GO

Se necesitaron unos disparadores digitales de gran precisión para poner en marcha los cientos de eventos en una sucesión extremadamente rápida. Estos disparadores estaban conectados a varios brazos robóticos de alta velocidad Bolt que, convenientemente protegidas, llevaban las cámaras que grababan la acción.

ONE MOMENT OK GO

En esta compleja planificación también se tenía que tener en cuenta la velocidad a la que grababa la cámara, puesto que eran distintas según las tomas. Cada sección tenía una velocidad o frecuencia constante, por lo tanto no había aceleración o desaceleración (efecto “ramp”), pero las velocidades podían ser diferentes entre tomas. Así, cuando las guitarras explotan la velocidad era de 6.000 cuadros por segundo (200x más lento que la realidad) pero en las tomas de sincronización de labios de las fotos, la velocidad era de 90 cuadros por segundo (3x la velocidad real). La explosión de los melones es de 150x y los botes de pintura de 60x.

Aunque la rutina estaba planificada como un único evento, en realidad no hay ningún sistema de control de cámara que se mueva tan rápido como hacía falta, por lo tanto un vídeo con esta complejidad y duración no se podía hacer con una sola cámara. Es por eso que el vídeo de “One Moment” conecta siete movimientos distintos de cámara. Por lo tanto un trabajo técnicamente complejo y muy conseguido.

ONE MOMENT OK GO