El nuevo y extraordinario videoclip del músico Bonobo para su canción “No Reason” es un recorrido visual por habitaciones que se van empequeñeciendo cada vez más, y donde no hay ningún efecto generado por ordenador, todo es creado en cámara.

El director y artífice de este difícil trabajo es el joven cineasta británico Oscar Hudson, y en el vídeo podemos ver a un “hikikomori”, que así llaman en Japón a las personas que se encierran en el dormitorio de sus casas durante años para escapar de la presión de la sociedad. La cámara empieza a moverse hacia una puerta que lleva a otra habitación idéntica, y luego hacia otra habitación y así sucesivamente, y donde el protagonista aparece en cada espacio cada vez más y más grande, mientras los detalles de la habitación cambian ligeramente.

Aquí podéis ver el vídeo y luego os contamos sobre su proceso:

Hudson dice que la idea le vino a través de conversaciones con Bonobo donde éste le hablaba de su relación con los espacios y lugares cuando estaba de gira, y la sensación de desorientación y alienación cuando estaba sin lugar fijo durante largos periodos de tiempo. Así que Hudson decidió crear un vídeo que enlazara muy directamente el entorno y el espacio físico con un aspecto de perspectiva psicológica. Cuando conoció el fenómeno de los “hikikomori”, utilizó esta base para crear una serie de habitaciones que gradualmente y de forma claustrofóbica van encogiéndose alrededor de su ocupante.

Pero hubiera sido muy sencillo crear digitalmente estos efectos a través de animación, pantalla verde o incluso motion control, y lo que Oscar Hudson quería era crear físicamente estas ilusiones y efectos. Según el director, los efectos en cámara aportan un nivel de interés mayor a un concepto porque la gente se queda pensando en cómo se han conseguido hacer. Y nosotros desde luego también nos lo hemos preguntado.

Desde luego desde una perspectiva técnica el reto era muy grande. En primer lugar, tuvieron que reproducir el set 18 veces, con 18 escalas diferentes, construyendo a mano la mayoría de los objetos dentro de las habitaciones, en un gran trabajo del director de arte Luke Moran-Morris. En este sentido, el diseño minimalista y líneas rectas de las casas japonesas funcionaba muy bien desde el punto de vista de la perspectiva. También los muebles bajos ayudaban a utilizar el ángulo bajo de la cámara. Y por último las alfombras o tatamis ayudaron también a poder preparar el sistema que se necesitaba para mover la cámara, otro de los grandes retos.

BONOBO

La idea principal del vídeo era tener una cámara que fuera recorriendo una larga secuencia de habitaciones que se iban empequeñeciendo, todo ello hecho físicamente al 100%. Lo primero que había que hacer era buscar una cámara que no fuera más alta que 20 cms y no más ancha que 7 cms para que pudiese caber a través de la puerta más pequeña de los sets construidos. Después de varias pruebas decidieron utilizar la Codex Action Cam, una cámara digital ultra compacta del fabricante Codex, y que utiliza un grabador externo de la propia marca, un sistema 14-bit y con un rango dinámico de 11 stops Full HD con posibilidad de grabar en RAW hasta 60fps.

codex action cam ii

Una vez decidida la cámara había que ponerla a circular al nivel del suelo durante un trayecto de 27 metros moviéndose en espacios que podían ser tan pequeños que no podía siquiera ser empujada a mano. Los especialistas de grip no pudieron ayudarles, por lo cual el propio Oscar Hudson con la ayuda del director de fotografía Ruben Woodin Dechamps tuvieron que construir uno enteramente nuevo. Básicamente lo que hicieron fue adosar la cámara a una tabla estrecha de madera, se cubrió la base de la tabla con moqueta, y se utilizó un linóleo fino para arrastrar la cámara por el tatami tirando de un cable.

BONOBO

A fin de mantener el recorrido en línea recta, y también para mantener oculto el cable, se hizo una hendidura de un milímetro en el suelo en la mitad del set en toda su longitud y se colocó un clavo en el frontal de la base de madera de la cámara. Se sujetaba el cable a este clavo y entonces la cámara podía ser arrastrada mientras el cable permanecía oculto. Complicado pero funcionó.

Terminamos con unas declaraciones de Oscar Hudson: “Hacer el vídeo con efectos CGI hubiera sido mil veces más fácil, pero para mí, el aspecto físico y sus imperfecciones es lo que lo hace diferente, y espero que mejor”. Desde luego le ha salido un trabajo muy curioso.

BONOBO

ACTUALIZACIÓN POST 11/04/2017

Actualizamos este Post con un estupendo Making Of recién publicado donde podemos ver el proceso de grabación y donde vemos igualmente cómo se utilizaron varios actores del mismo aspecto para que apareciesen en las distintas habitaciones como si fuera el mismo personaje: